Idhún

La Creación de Idhún[]

La mitología idhunita presenta a los Seis trabajando en perfecta armonía en su nuevo mundo, cada uno de ellos especializado en un aspecto concreto de la creación. Karevan modeló todas las formaciones rocosas: cordilleras, acantilados, riscos y barrancos. Neliam orquestó los movimientos del océano en sintonía con el poder de las lunas, hizo fluir los manantiales, delineó los ríos y llenó los lagos. Wina cubrió la superficie del mundo con un manto de verdor. Yohavir hizo soplar los vientos y transformó la inhóspita atmósfera de Idhún en aire suave, fragante y, sobre todo, respirable. Aldun alimentó los soles y llevó el fuego hasta la superficie del mundo. Irial mantuvo brillantes las estrellas y puso nombre a todas las cosas; llamó a este nuevo mundo «Idhún», que significa «El Mundo», el definitivo, quizá en oposición al «primer mundo» que fue Umadhún. No obstante, la diosa reservó sus fuerzas para uno de los proyectos más ambiciosos de Um: la inteligencia autoconsciente. Después, los dioses se encarnaron en cuerpos materiales para poder modelar los detalles más delicados de la creación, probablemente porque sabían lo que sucedería si descendían al mundo bajo sus formas originales. Pero un día Aldun se olvidó de esta precaución, y cuando su esencia pura rozó la tierra, todo ardió, envuelto en violentas llamaradas. Cuando el fuego se apagó, una extensa zona de Idhún había quedado completamente arrasada, para desesperación de la diosa Wina. De hecho, los sacerdotes de ambas Iglesias parecen aceptar la teoría de que este episodio pudo ser el origen de la proverbial rivalidad entre Aldun y Wina, y podría explicar también por qué las hadas que se internan en el desierto de Kash-Tar se marchitan como flores bajo el calor abrasador de los soles. Tras poblar el mundo de un amplio catálogo de especies animales y vegetales, cada dios desarrolló una raza diferente en función de sus preferencias e inclinaciones. Las leyendas dicen que cada uno de ellos dio cuerpo a su propio elemento; según esto, los gigantes habrían sido creados por Karevan a partir de la piedra, los yan encierran en su interior el fuego de Aldun, el alma de los humanos es luminosa como Irial, los celestes son aire encarnado, los varu están conformados de agua y los feéricos personifican la fuerza de la vida de Wina. Pero fue Irial, según se cuenta, quien dotó a todas estas razas de conciencia e inteligencia, quien encendió en ellas la chispa de la razón que las distingue de las simples bestias y les dio la capacidad de hablar y de razonar. Después, los dioses repartieron a sus criaturas por el mundo. Los humanos se diseminaron por el fértil valle que se extendía al sur del Anillo de Hielo. Los feéricos de Wina poblaron los bosques del este. Los gigantes de Karevan, fuertes, resistentes e independientes, encontraron un hogar a espaldas del mundo, en el extremo norte, al que llamaron Nanhai. Los varu se perdieron en el vasto océano y, con el paso del tiempo, algunos incluso remontaron los ríos y colonizaron lagos y manantiales de agua dulce. A los yan los condenaron a habitar las tierras calcinadas por su dios, Aldun. Y dicen las leyendas celestes que los dioses colocaron a su pueblo en la región central, porque eran pacíficos y no tenían maldad ni ambición, y por tanto su presencia actuaría como elemento equilibrador entre las demás razas. Una vez hubieron hecho todo esto, los dioses se retiraron a Erea para contemplar su mundo desde allí. Y los idhunitas comenzaron a ser protagonistas de su propia historia.

Historia[]

Idhún fue creado por los Seis despues de fracasar en Umadhun. Los Seis crearon el mundo junto con seis especies, una por cada dios: Neliam a los varu, Wina a los feéricos, Irial; los humanos, Karevan; los gigantes, Yohavir a los celestes y por último Aldun a los Yan.Tiempo después, también crearon a los los Unicornios para hacer que la energía fluyera y no se estancara y estos entregaron el don de la magia a los mortales siendo Pildar el primer mago de toda la historia.Tras eso, los Seis expulsaron todo el mal de ellos y, sin querer, formaron al Séptimo, otro dios, que después de unirse a un espíritu de una serpiente (como relata el cuento "La Sombra sin nombre"). Se reveló contra los Seis pero el fue derrotado y encerrado en una prission magica llamada la roca muerta y esa roca la lazaron a los oceanos de Idhun. Despues de encerrar al Septimo la paz reino en Idun durante miles años en los cuales se formaron los actuales reinos y las actuales organitzaciones como la Isglesia de Idhun y la orden magica pero un buen dia el Septimo logro liberarse y al tener la misma indentidad que los Seis creo a los sheks para que lucharan con los dragones creados para destruir a las reencarnaciones del Septimo, a ambas especies los dioses les infundieron un odio irracional para que comenzaran a luchar entre si. Tras siglos de lucha los sheks son derrotados y tambien szish otra raza tambien creada por el Septimo, las dos especies son obligadas a ocultarse y algunos sheks son exiliados a los confines del mundo. Durante este tiempo no paso nada importante hasta que en la Segunda era, Talamanon conquisto Idhun con la ajuda de sheks y szish y goberno como emperador durante un milienio( dicha proeza la consiguio gracias el anillo Shiskatchegg que teia la capacidad de controlar la voluntat de todos los magos de Idhun), hasta que un dia Ayshel fue convertida en semimaga y los Unicornios le dieron un poderoso baculo llamado el Baculo de Ayshel con el reconquisto Idun de las garras de Talmannon matando a este ultimo en una batalla decisiva, aunque ella tambien murio en dicha batalla.

Tras la muerte de Talmannon los sheks fueron exiliados a Umadhun y los magos fueron exiliados de Idhun ja que los sacerdotes creian que habian ajudado a Talmannon por propia voluntat, asi que durante siglos los magos de Idhun se exiliaron a otros mundos hasta que el lider de la Iglesia de Idhún, Raelan, fue sorprendido adorando a El Séptimo. La Iglesia de Idhún se dividió en dos, la Iglesia de las Tres Lunas y la Iglesia de los Tres Soles, y los magos regresaron. Durante esta era los dragones exterminan casi por completo a los szish por haber ajudado a los sheks.

Cuando los magos regresaron, al principio de la Era de los Archimagos, la Orden Mágica se reactivó y se volvieron a poblar las tres torres, la Torre de Awinor, la Torre de Kazlunn y la Torre de Derbhad. Pero los magos fueron más allá y edificaron una cuerta torre, la Torre de Drackwent, en el corazón de Alis Lithban. Los magos que se educaron en esa torre tenían un poder más grande y poderoso, y se los llamó Archimagos 20 siendo uno de ellos y el ultmo Qaydar). Pero los sacerdotes obligaron a los magos a clausurarla, dado que debían haber tres Oráculos y tres torres para mantener el equilibrio de poderes, cuando habían veinte Archimagos. Durante ese tiempo se forjo la Domivat creada por un dragon visionario que tenia el mismo nombre que su espada, tambien cal destacar la creación de un grupo de dragones llamados rastreadores que cruzaban la Puerta interdimensional a Umadhun y comenzaban a matar sheks por placer. Estos hechos siguieron passando hasta que un dia un mago mediocre pero ambicioso y adorador del Septimo llamado Ashran fue posseido por el Septimo y provoca una Conjunción Astral exterminando a todos los dragones y unicornios salvo un dragon llamado Yandrak y una unicornio llamado Lunaris, ambos son enviados a la Tierra donde se entran en los cuerpos de dos jovenes Jack y Victoria. Un dia años despues estos dos jovenes vuelven a Idhun donde tras vivir muchas aventuras junto a Kirtash hijo de Ashran quien Kirtash lo traiciono por su amor a Victoria, derrotan a Ashran el Septimo es liberado de el los Seis vuelven a Idhún se libra la Batalla de los Siete, y a todo ello sobrevive un Archimago, Qaydar. Después el ultimo archimago muere en el 1475 de la 4ª era, en ese momento se acaba la archimagia muchos dicen que en ese momento acaba la cuarta era pero también hay quien adelanta la fecha hasta el 1473 cuando se produjo la conjunción de los seis astros de forma natural, esta vez sin otra consecuencia que la de ofrecer a los idhunitas un espectaculo maravilloso.

Geografía y lugares de interés[]

Nandelt

 -Reinos humanos:
   *Vanissar
   *Raheld
   *Nanetten
   *Dingra
   *Shia
 -Llanuras de Shur-Ikail
 -Kazlunn
   *Torre de Kazlunn

Kash-Tar

Nanhai

 -Gran Oráculo

Drackwen

 -Pantanos de Raden
 -Alis Lithban
 -Nangal
 -Picos de Fuego
 -Oráculo de Raden
 -Torre de Drackwen

Awinor

 -Torre de Awinor

Derbhad

 -Bosque de Awa
   *Oráculo de Awa
 -Trask-Ban
 -Gantadd
   *Oráculo de Gantadd
 -Cordillera Cambiante
 -Torre de Derbhad

Celestia

 -Ciudades celestes

Reino Oceánico

 -Ciudades submarinas
 -Islas del Reino Oceánico
   *Tares
   *Islas de Riv-Arneth

Lenguajes[]

Idhunaico

Idhunaico arcano

Dialecto Limyati

Dialecto Ganti

La lengua principal y común a todos sus habitantes es el idhunaico , de la que conocemos por la triología algunas palabras y ciertas expresiones y de como sería su escritura gracias a la versión en cómic. Este idioma tiene dialectos y formas características de hablarlo como por ejemplo los yan que no separan las palabras y para algunas personas es difícil de entender o el acento del los szish, que remarcan los sonidos silbantes.

Se podría incluir al idhunaico arcano (del que no se conoce ninguna palabra) como una versión antigua, como su nombre indica, del idhunaico actual. Este lenguaje es solamente utilizado por los magos para dar forma a su voluntad mágica y pronunciar sus hechizos.

El idhunaico tiene además algunos dialectos:

Limyati: es hablado por el pueblo de Kash-Tar del mismo nombre (gente de la frontera según su nombre). Según Victoria es un dialecto parecido al idhunaico arcano por lo que puede contener palabras más arcaicas.
Ganti: es hablado también por el pueblo de mismo nombre ("mestizos"). En la triología solamente Zaisei habla con ellos y al ser una celeste no tiene problemas para comunicarse en otros idiomas, por lo que no tenemos datos de este idioma.

Además del idhunaico existe el idioma szish, que habla esta raza. El lenguaje recuerda mucho a los siseos de una serpiente y está plagado de silbidos y siseos.