Widhún - Memorias de Idhún
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Hábitat Celestia
Raza Pielseca

Sangrecaliente

Dios asociado Yohavir
Forma de gobierno Consejo de ancianos
Personajes clave Ha-Din
Zaisei

Mei

Historia y costumbres[]

La habilidad empática de los celestes es el principal factor que condiciona sus relaciones con el resto de razas. Si bien tienden a ser discretos, con la revolución que provocó el cambio en el rito matrimonial idhunita se produjo una reacción global en la que la gente acudió en masa a consultar a los celestes sobre los lazos, las relaciones y todo tipo de cuestiones relacionadas con los sentimientos.

Son una raza extremadamente pacifica, por los que casi nunca es blanco de agresiones de las otras razas. Pese a ello, es muy reducida en número, y sus poblaciones están distanciadas dentro de Celestia.

Los celestes suelen sufrir en la convivencia con otras razas, especialmente si mantienen una relación sentimental con un no celeste, quienes sienten la obligación de exteriorizar sus sentimientos, algo innecesario para un celeste. Una de las soluciones para estos conflictos es la utilización de algas balu.

Son vegetarianos, ya que su empatía se extiende también hacía los animales, especialmente hacía las aves, por ser criaturas del aire como ellos. Por esta razón son muy eficientes en la cría de pájaros Haai, su principal medio de transporte; son capaces de levitar hasta los nidos de estas aves y de convocarlas mediante el canto de una melodía.

El hecho que los celestes vean claramente los sentimientos ajenos y permitan que se perciban los propios, junto la naturaleza etérea de esta raza, provoca que vistan ropas muy livianas y transparentes, casi impúdicas para razas más reservadas.

Los nombres de las mujeres celestes terminan en -ei en honor a Mei, y los de los varones son compuestos por dos partes unidas por un guión.

Religión =[]

Adoran al dios Yohavir, representación del aire, los sentimientos y lo etéreo. La capacidad para percibir los lazos otorga a los sacerdotes celestes la responsabilidad de oficiar las ceremonias de unión conyugal idhunita.

Historia[]

En el pasado, dada la naturaleza pasiva de los celestes, estos eran objetivo de constantes amenazas y ataques por parte de las poblaciones o reinos vecinos. La más conocida fue la invasión por parte de la Gran Shia. El rey de Shia exigió que una mujer celeste pasara una noche con él, evidenciando que iban a tener relaciones de índole sexual. Las mujeres celestes se negaron, ya que quebrantaba sus ideales de pureza, así que aceptaron ser ejecutadas, pero una joven niña llamada Mei aceptó pasar una noche con él. Todo el mundo quedó horrorizado y asombrado por la niña, que sacrificaba su condición de celeste para proteger a los demás. Pasó una noche y el rey ordenó retirar todas las tropas de Celestia, restituyendo daños y pagando indemnizaciones por los daños causados, este acto marcó el inicio del fin de la Gran Shia, que daría paso a la Shia erudita que fue destruida por los sheks. Nunca se supo qué ocurrió aquella noche entre Mei y el rey. Algunos creen que ésta le drogó; otros que simplemente escuchó sus problemas; otros creen que Yohavir, protector de los celestes, intercedió con el fin de protegerles y se manifestó en el cuerpo de Mei. Sea como fuere, el rey retiró sus tropas, y ahora todas las mujeres celestes deben tener nombres acabados en -ei en honor a Mei, que salvó su tierra.

Personajes notables[]

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